Leopardo de las nieves
La población de leopardo de las nieves ha caído un 20% en los últimos veinte años, y se estima que su población en libertad ronda tan solo los 4.000 ejemplares. Para que nos sirva de referencia, la población de tigres en libertad, una especie muy amenazada, es de 3.890 individuos. Según la IUCN y su "lista roja de las especies amenazadas", el leopardo de las nieves se encuentra en la categoría "en peligro de extinción". Su población se concentra en Asia Central, en 12 países, los más destacables son: China, Bután, Nepal, India, Pakistán, Afganistán, Rusia y Mongolia.
Caza ilegal:
El tráfico de especies es una de sus principales amenazas. Los furtivos colocan trampas o cepos para cazarlos y comerciar con sus pieles o huesos muy codiciados en la medicina asiática. A menudo, estas trampas llegan amputarles sus patas y mueren incapaces de conseguir alimento. Se estima que desde 2008 entre 221-450 leopardos han sido víctimas de lo furtivos.
Pérdida de hábitat:
El aumento de ganado y la construcción de nuevas infraestructuras está reduciendo su hábitat. Esto, a su vez, supone un doble problema, ya que trae consigo una tercera amenaza: el conflicto con las comunidades locales por los ataques al ganado. El incremento de estos ataques son resultado de la reducción de su hábitat y, por tanto, del número de presas a la que este animal tiene acceso en libertad, lo que empuja a este felino a atacar el ganado para alimentarse.
Climático:
Como al resto de especies del mundo, el cambio climático pone la guinda acelerando la pérdida de hábitat. En el caso del leopardo de las nieves es más grave ya que habita en la montaña a partir de 3.000 metros de altura como la cordillera del Himalaya, un ecosistema muy vulnerable a los efectos del cambio climático.